Barcelona cuenta por primera vez con un Plan del juego en el espacio público, un plan pionero y ambicioso que sitúa el juego y la actividad física al aire libre entre las políticas claves para hacer una ciudad más habitable y mejorar la vida de los vecinos y vecinas, empezando por los niños, niñas y adolescentes.
El Plan, que se ha presentado durante la jornada Juego y ciudad, en la que se ha debatido sobre el juego de niños, niñas y adolescentes en el espacio público, pretende mejorar y diversificar las oportunidades de juego y actividad física en el espacio público por sus amplios beneficios tanto para el desarrollo y bienestar de la infancia y la adolescencia como en la salud y la vida comunitaria y la convivencia de toda la ciudadanía.
Es el resultado de un proceso transversal y participado, coordinado por el Institut Infància i Adolescència, con más de 400 personas involucradas, tanto profesionales municipales, entidades, personas expertas, niños y adultos. Este trabajo, de más de un año, ha servido para construir horizonte, criterios y acciones entre el Ayuntamiento y entidades y expertos. Así, el plan recoge demandas ciudadanas y sociales, se inspira en planes de juego pioneros de otras ciudades como Dublín o Londres y responde a las recomendaciones de Naciones Unidas para hacer avanzar el derecho al juego, derecho humano específico de niños y adolescentes.
El plan del juego en el espacio público de Barcelona supone un cambio de paradigma en la visión del juego. Barcelona aspira a pasar de ser una ciudad con áreas de juegos infantiles en una ciudad para el juego en el espacio público, “una ciudad jugable”. Una ciudad con zonas específicas de juego más diversas, creativas, accesibles e inclusivas que las actuales. Algunas de ellas incluyen juegos singulares por su vida y multiplicidad de usos. Se trata sobre todo, de romper barreras y de que el juego desborde los entornos de las áreas, y vaya mucho más allá, poniendo el urbanismo de toda la ciudad a disposición del juego.
Con esta visión, el Plan del juego concreta 63 actuaciones que responden a una óptica integrada y transversal que combina acciones de urbanismo (desde microintervenciones y urbanismo táctico a grandes transformaciones urbanas) y acciones sociales (desde dinamizaciones itinerantes a nuevos conceptos en servicios públicos).
El Plan del Juego se articula en torno a 3 ejes estratégicos:
- Más y mejores espacios para el juego en el entorno urbano: la infraestructura lúdica en una ciudad jugable
- El estímulo de la actividad lúdica y física al aire libre: los usos lúdicos en una ciudad jugada
- El impulso de un cambio de paradigma: el juego gana lugar en la ciudad
Y define 10 metas hasta el 2030:
- Garantizar el juego diverso y creativo en las áreas de juego
- Asegurar unos estándares mínimos de superficie y jugabilidad en las áreas de juego
- Revertir el déficit de juego con elementos naturales de agua y arena en los espacios lúdicos y áreas de juego
- Doblar las posibilidades de juego con retos y gestión del riesgo
- Promover el juego compartido y colaborativo y la actividad física en grupo al aire libre
- Incrementar las oportunidades de juego de las personas con diversidad funcional
- Mejorar la habitabilidad de los espacios verdes como lugares de encuentro social y espacios lúdicos
- Mejorar los patios escolares para que favorezcan la diversificación del juego y la coeducación en entornos más naturalizados y sostenibles
- Mejorar los entornos de los centros educativos poco adecuados ambientalmente y para la socialización
- Revertir el sedentarismo y el déficit de juego activo al aire libre en la infancia y juventud de la ciudad
Enlace hacia la nota de prensa del Ayuntamiento sobre el Plan de juego
