Planificar la ciudad para favorecer el derecho al juego, establecer zonas de baja emisión alrededor de los equipamientos con gran afluencia de niños, niñas y adolescentes o incorporar los derechos de éstos a la ordenanza por la convivencia son sólo 3 de las 24 consideraciones que el Grupo transversal Espacio público, infancia y adolescencia pone sobre la mesa con el objetivo de hacer de Barcelona una ciudad más adecuada para vivir la infancia y la adolescencia.
Las 24 consideraciones se recogen en el documento de trabajo Consideraciones sobre el espacio público con perspectiva de infancia y adolescencia que se ha acordado y consensuado por parte de responsables técnicos de gerencias y servicios municipales de las áreas de Ecología Urbana, de Derechos Sociales y de Derechos de Ciudadanía del Ayuntamiento de Barcelona en el marco del Grupo transversal impulsado y coordinado por el Instituto entre los meses de marzo de 2016 y junio de 2017. Durante estos 16 meses de recorrido del grupo, se han llevado a cabo ocho sesiones de trabajo y una sessión especial con el pedagogo y especialista en infancia y ciudad, Francesco Tonucci, en el marco de la jornada El derecho de la infancia en la ciudad: mejoramos nuestro espacio público.
El objetivo del documento es que sea una herramienta útil para las diversas áreas, servicios y distritos municipales y que estas consideraciones se tengan en cuenta en la construcción de la ciudad. No sólo porque, así, la ciudad será más adecuada para vivir la etapa de los 0-17 años, sino porque, gracias a tener en cuenta los intereses de niños, niñas y adolescentes, la ciudad será mejor para todas las personas que viven en ella.
